El especialista ENRIQUE ECHEBURÚA, CATEDRÁTICO DE PSICOLOGÍA cree que el ludópata es «sólo el extremo patológico del juego»
El catedrático de Psicología de la UPV, Enrique Echeburúa, clausuró ayer el I Symposium sobre Juego Patológico celebrado en Villa Suso. Ante cerca de 200 personas, el ilustre especialista desgranó las causas que pueden llevar a que una simple afición al juego se convierta en adicción. El miedo al rechazo social que sienten estos enfermos y la relación de la ludopatía con otros problemas como el alcohol, las drogas o la depresión son algunas de las claves que se han de tener en cuenta a la hora de prestar ayuda a estas personas.
-Se estima que en España más de 500.000 personas sufren serios problemas con el juego y casi 800.000 presentan algunos de los síntomas característicos de los ludópatas. Se dice pronto
Extrapolando los datos de estudios realizados por ejemplo en Galicia, yo calculo que puede haber entre un 1 y un 3% de la población adulta que sea ludópata o que tenga problemas con el juego. Porque, hay que tener en cuenta que el ludópata es tan sólo el extremo patológico del juego.
¿Dónde se establece entonces la barrera entre la afición y la adicción?
La afición forma parte del uso de la libertad de una persona pero, ¿cuándo se convierte en adicción? Existen varios criterios: cuando se da una interferencia grave en la vida cotidiana de una persona, cuando surge una falta de rendimiento en los estudios o en la vida familiar y laboral o cuando el individuo comienza a jugar para recuperar el dinero perdido.
-Sin embargo, el jugador patológico rara vez reconoce serlo.
Todas las adicciones suponen un mecanismo de negación por parte de los pacientes porque están muy mal vistas socialmente. ¿Qué ocurre? Que un jugador, si juega normalmente, no tiene porqué ocultar su afición. Pero, cuando esa persona se convierte en un jugador patológico, es consciente de que va a ser objeto de un rechazo social. Ello le lleva a no reconocerse como jugador y le impide buscar ayuda.
Alcohol y depresión
¿Es la ludopatía una adicción que se presenta asociada a otras, como el alcohol o las drogas?
La ludopatía es frecuente asociada al abuso de alcohol y de drogas porque se bebe donde se juega y se juega donde se bebe. Sobre todo en el caso español, donde el jugador patológico es jugador de máquinas tragaperras. Por otra parte, la depresión en estas personas es otro problema añadido.
¿Cuál es el perfil clásico de un ludópata?
Hay que distinguir entre los ludópatas y los ludópatas en tratamiento. Los que buscan ayuda son hombres de 30 a 40 años que tienen un historial de juego de más de una década y que juegan fundamentalmente a las máquinas tragaperras. Y los hay de todas las clases sociales.
¿Qué hacer ante la ludopatía?
En cuanto se detecta el problema, lo más importante es ayudar a la persona a tomar conciencia de ello, siempre insistiendo en que no es un vicio sino una enfermedad y en que el enfermo no tiene la culpa de nada.
EL CORREO/VITORIA ÁLAVA